Entre los comportamientos que más nos incomodan a los dueños de perros, se encuentra la tendencia a morder TODO lo que se encuentra en su camino ¿Es normal? ¿Hay un punto en el que este comportamiento nos debe preocupar?
Cuando son cachorros es un comportamiento totalmente usual y se debe a dos motivos fundamentales. El principal es que tu cachorro está explorando y ejercitando su sentido del tacto a través de la boca; y en segundo lugar, están mudando sus dientes y el modo que tiene de aliviar el dolor se basa en mordisquear constantemente.
Sin embargo, si tu perro es adulto y continúa con este tipo de acciones, lo mejor es que identifiques la causa para tratar de inhibir esta tendencia. Los posibles motivos que llevan a nuestro perro a morderlo todo son: la ansiedad, el aburrimiento, el dolor de encías o la hiperactividad.
La ansiedad y el aburrimiento se desencadenan en el animal cuando se sienten solos. Por ello, es muy común encontrarse con algún destrozo cuando salimos de casa y los dejamos solos un rato. Sin duda, la situación de estrés y ausencia de los dueños les da vía libre para morder todo lo que encuentren.
La hiperactividad que poseen algunos de estos animales, les lleva a liberar energía por medio del mordisqueo constante. Ven en esta actividad una forma de relajación y entretenimiento. Este sería otro de los motivos por lo que un perro muerde todo lo que encuentra a su paso.
CÓMO CONSEGUIR QUE TU PERRO DEJE DE MORDER COSAS
Entonces, ¿cómo podemos atenuar estas tendencias? Lo primero es mostrar al animal que debe respetarnos, no sólo a nosotros, también todo lo que nos pertenece. En cuanto pillemos a nuestra mascota realizando algo indebido, debemos disuadirle y mostrarle que no es lo adecuado. Parece fácil decirlo, pero ¿Cómo hacerlo?
– Pues bien, en el caso de que le hayamos visto in fraganti mordisqueando algún mueble u objeto debemos llamar su atención con voz grave y fuerte, un NO seco debe bastar, incluso podemos acompañarlo con una palmada (Nunca le agredimos físicamente). Ellos no entiendes porque les regañas, pero pensarán:
«No sé por qué, pero cuando estaba mordiendo sus zapatos, me han regañado…algo estoy haciendo mal…»
– Los sonidos fuertes le asustarán. En ese momento le ofreceremos otro juguete para que siga su actividad con algo que realmente es suyo, y le acariciamos, incluso le diremos algo con voz suave para que sepa que con su juguete si puede jugar y morder.
– Es muy importante que este juguete no sea algún utensilio o prenda antigua nuestra o que consideremos inservible, ya que si no, empleará otros elementos similares que se encuentre por casa cuando nos descuidemos…no caigas en el error de proporcionarle objetos como un zapato viejo o acabará jugando con todo tu calzado.
– Si detectas como causa principal, la soledad que siente cuando lo dejas en casa, recuerda dejar siempre sus juguetes para que se entretenga con ellos y no se dedique a explorar todos los rincones. Puedes también pensar en contratar a alguien que le dé un paseo a tu perro.
– Finalmente, si tu perro muerde todo y cada vez que está en casa se dedica a morder los muebles y demás… Lo mejor es que asegures tu actividad física diaria. El ejercicio le permite descargar energía. De esta forma, cuando esté en casa estará más tranquilo y no morderá nada.
Pero lo que es de verdad fundamental, sobre todo durante tu estancia en el hogar, es la vigilancia del animal. La constancia en su entrenamiento y educación es el único modo existente para que el perro asimile lo que debe hacer y lo que no. Puedes probar a dar la espalda a tu cachorro cuando quiera morderte.
Desde pequeños deben aprender a respetar. Si hay niños en casa, es muy importante que aprendan a jugar con el perro y sus juguetes. Cuando el perro no suelte el juguete, los niños no deben tirar, porque jugando, podría intentar coger el juguete y “morder” al niño sin querer. Educar al perro a que suelte el juguete sin problema es otro pasito más en una buena educación del animal, poco a poco.
Por lo tanto, evitar el mordisqueo de objetos, garantizar una convivencia adecuada, y tener unos muebles cuidados es posible siguiendo pequeños consejos.